Cuando fundamos ketteQ, no empezamos con un código heredado o una arquitectura obsoleta. Empezamos con una pizarra en blanco, y eso lo cambió todo.
No tuvimos que cargar con la profunda deuda técnica de arquitecturas de sistemas de hace una década, ni depender de sistemas patentados y supuestos heredados. En lugar de ello, fuimos capaces de diseñar una solución de planificación radicalmente distinta desde cero, creada específicamente para responder a los retos a los que se enfrentan hoy los responsables de la cadena de suministro, no a los de hace 20 o 30 años.
Una de las decisiones más tempranas e impactantes que tomamos fue construir ketteQ de forma nativa en Salesforce.
¿Por qué Salesforce? Porque vimos lo que muchos otros aún no se habían dado cuenta: el sistema operativo empresarial del futuro ya existía. Millones de usuarios. Una plataforma sólida, segura y escalable. Un modelo de datos unificado. Flujos de trabajo fluidos. Y lo mejor de todo es que la mayoría de nuestros futuros clientes ya lo estaban utilizando.
No vimos la necesidad de reinventar la rueda o atornillar módulos desconectados. Vimos la oportunidad de ampliar la potencia de Salesforce a un espacio en el que aún no había llegado: la planificación avanzada y adaptable de la cadena de suministro.
Esa decisión se ha convertido en una de las principales razones por las que los clientes dicen sí a ketteQ.
También se ha convertido en una gran oportunidad para nuestros socios consultores.
Al basarnos en Salesforce, hemos creado una solución que los socios consultores pueden respaldar con confianza, ya que encaja perfectamente en sus prácticas existentes de Salesforce. Tanto si se trata de un socio de implementación de Salesforce, un consultor de transformación digital o una empresa de asesoramiento de cadena de suministro, ketteQ les proporciona algo realmente diferenciado que ofrecer a sus clientes: una funcionalidad de planificación de vanguardia que mejora el valor de Salesforce y abre la puerta a nuevas fuentes de ingresos.
De hecho, muchas de nuestras implantaciones de mayor éxito en la actualidad se están produciendo en estrecha colaboración con nuestro ecosistema de socios. Esto demuestra que los resultados hablan por sí solos cuando se combina una profunda experiencia en la cadena de suministro con la innovación nativa de Salesforce.
Cuando me reúno con directores de sistemas de información, directores de operaciones y ejecutivos de la cadena de suministro, la conversación suele comenzar con un entendimiento común: ya han invertido en Salesforce. Sus equipos lo utilizan. Sus datos fluyen a través de él. Sus departamentos de TI confían en él.
Así que ya hablamos su idioma cuando mostramos cómo ketteQ se basa en esa inversión existente en lugar de sustituirla.
No es una venta difícil. Es un "sí" fácil.
Porque no se trata sólo de tener una gran solución de planificación; se trata de tener una solución que encaje perfectamente en el mundo en el que ya operan. Una solución que reduzca la complejidad, acelere la implantación y maximice la rentabilidad.
La mayoría de los sistemas de la cadena de suministro se diseñaron en una época diferente: una época en la que los cambios eran más lentos, las interrupciones globales eran poco frecuentes y la optimización y la resistencia eran algo bonito, no una estrategia de supervivencia. Esos sistemas no pueden seguir el ritmo de la volatilidad, la incertidumbre y las expectativas de los clientes de hoy en día.
Por eso no nos limitamos a modernizar la arquitectura heredada. Hemos diseñado una nueva. Tomamos decisiones audaces, como integrar nuestro motor de resolución de IA agéntica, PolymatiQ™, en el corazón de la plataforma. Y hemos creado todo para que sea adaptable, multipase y se base en escenarios desde el primer día.
Basarnos en Salesforce nos ha permitido avanzar aún más rápido. Los clientes no tienen que crear un nuevo sistema ni reconfigurar su arquitectura empresarial. Si ya utilizan Salesforce, ya tienen la infraestructura que necesitan para ejecutar ketteQ.
Esto nos permite implantarlo en una fracción del tiempo que necesitan los proveedores tradicionales. La mayoría de las implantaciones de ketteQ duran entre 3 y 6 meses, en lugar de años.
Otra razón por la que los clientes dicen "sí" es que sus usuarios ya conocen Salesforce.
No hay curva de aprendizaje. No hay resistencia. Sin reciclaje. Sólo nuevas y potentes funciones de planificación que parecen una extensión natural del sistema en el que ya confían.
Esto es más importante de lo que la mayoría de la gente cree. En las grandes organizaciones, la adopción por parte de los usuarios suele ser el obstáculo más importante para obtener valor de las nuevas herramientas. Nosotros eliminamos esa barrera manteniéndonos dentro del ecosistema en el que la gente confía y utiliza a diario.
Cuando se combina un motor de planificación moderno, la integración nativa con Salesforce y una experiencia de usuario intuitiva, ocurre algo poderoso: las organizaciones obtienen valor real y significativo rápidamente.
Hemos visto cómo nuestros clientes mejoraban la precisión de las previsiones, reducían el inventario, aumentaban los niveles de servicio y mejoraban la puntualidad de las entregas, a menudo a las pocas semanas de su puesta en marcha. Y como estamos alineados con los datos y flujos de trabajo de Salesforce, los conocimientos que proporcionamos no se quedan en un silo, sino que impulsan la acción en toda la empresa.
Creamos ketteQ para construir lo que los proveedores tradicionales no podían ni querían: un sistema ágil, adaptable, inteligente, conectado y preparado para las realidades de las cadenas de suministro modernas.
Construir sobre Salesforce nunca fue sólo una función; esta decisión estratégica de diseño sigue reportando dividendos para nosotros, nuestros clientes y nuestros socios.
Así que, cuando surge la conversación sobre Salesforce, no es un debate. Es un diferenciador. Es la razón por la que nuestros clientes dicen que sí y por la que siguen teniendo éxito con ketteQ.